La Gemoterapia es una disciplina que utiliza gemas y/o cristales para ayudar a sanar problemas físicos y/o psicológicos con resultados óptimos.

Alrededor de esta terapia hay tanto elementos científicos como esotéricos, pues existen amplios estudios en la química y física sobre los minerales y desde tiempos remotos los seres humanos les han otorgado poderes mágicos y espirituales. Aparte de que también cuentan con una parte ornamental y de sanación. En este texto nos centraremos en el proceso curativo de las gemas y cristales.

La posibilidad de curar de las gemas y cristales se centran en su capacidad de recibir, transmitir, transformar y renovar la energía que lo que está a su alrededor.

La mayoría de las civilizaciones, a través de la historia, han usado las gemas y cristales con un sentido mágico y religioso. De hecho, Platón indica en sus relatos que la Atlántida desapareció por un manejo erróneo de las gemas.

En India, Mesopotámia, China, los Incas, Aztecas, Mayas y los antiguos Indios Norteamericanos utilizaron las gemas de manera terapéutica, para atraer la virilidad y la fertilidad. También los usaron para vaticinar y con fines mágicos.

La capacidad energética de las gemas y cristales viene de su proceso de formación, pues la mayoría provienen del magma de la tierra. La formación de los cristales es un proceso que dura miles de años, aunque hay algunos científicos que indican que si se dan las condiciones apropiadas, se pueden formar en un instante.

Por medio de la cámara Kirlian (cámara que fotografía el aura) se logró comprobar que los cristales cuentan con un campo energético similar al que envuelve a todos los seres vivos. La estructura perfecta de los cristales absorbe, almacena, transforma y transmite la energía de su entorno. Cuando entra en contacto con un campo energético desequilibrado, su naturaleza energética lo transforma y equilibra. E. Ramos Morales dice que “…la energía de los cristales penetra con su resonancia en los espacios entre los átomos para transmitir cambios en las células”.

Es así como la Gemoterapia logra el objetivo de modificar las frecuencias del paciente para equilibrar su energía y de esa manera mejorar su salud.